El antecedente más cercano para la creación del Museo Histórico Nacional (MHN), se encuentra en la "Exposición del Coloniaje", organizada en 1873 por iniciativa de Benjamín Vicuña Mackenna, entonces Intendente de Santiago. La exposición motivó a la intelectualidad de la época respecto de la necesidad de conformar un museo histórico. Un año más tarde, en el Castillo Hidalgo del cerro Santa Lucía, fue la sede que albergó esta iniciativa. Tras la muerte de Vicuña Mackenna, en 1886, el museo comenzó a declinar y sus colecciones se dispersaron entre diferentes reparticiones públicas.
Con motivo del Centenario Luis Montt Montt, entonces director de la Biblioteca Nacional, propuso organizar una nueva exposición histórica, la cual generó gran interés. Esto llevó a solicitar al gobierno la creación del Museo Histórico Nacional, lo que se concretó el 2 de mayo de 1911. Funcionó primero en dependencias del Palacio de Bellas Artes, y más tarde en las de la Biblioteca Nacional. Durante este período, y debido a la falta de espacio para depósitos y exhibición, las colecciones nuevamente se disgregaron hacia otras instituciones.
En 1977 los responsables del museo, ante la necesidad de contar con una construcción propia, pusieron sus ojos en el antiguo edificio de la Real Audiencia, frente a la Plaza de Armas, el cual está íntimamente ligado de la historia de nuestro país desde sus orígenes coloniales. En septiembre de 1982, y luego de cuatro años de trabajos de restauración, fue inaugurada la actual sede del Museo Histórico Nacional.